REPARTO |
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Christopher Reeve, Margot Kidder, Gene Hackman, Marlon Brando, Ned Beatty, Jackie Cooper, Glenn Ford, Trevor Howard, Jack O'Halloran, Valerie Perrine, Maria Schell, Terence Stamp, Phyllis Thaxter, Susannah York, Jeff East, Marc McClure, Sarah Douglas, Harry Andrews. |
SINOPSIS |
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Desde una galaxia remota, un recién nacido es enviado por sus padres al espacio debido a la inminente destrucción del planeta donde viven. La nave aterriza en la Tierra, y el niño es adoptado por unos granjeros que le inculcan los mejores valores humanos. Con los años el joven se irá a Metrópolis y allí usará sus poderes sobrenaturales para luchar contra el mal. |
Christopher Reeve es Superman...
Esta versión setentera de Superman es una verdadera delicia kitsch; que apreciamos todos y cada uno de quienes la vimos como estreno en aquella lejana década que vio el nacimiento –y el ocaso– de la música disco. Y que personas más jóvenes que los que nacimos entre 1955 y 1965 quizás encuentren anticuada y sobrevalorada para los estándares actuales.
Llena de humor ingenuo y bien intencionado; con efectos especiales que deslumbraban –hace más de 40 años– a los espectadores en las repletas salas cinematográficas en que se exhibía….y que hoy tendríamos que ver con indulgencia si nos atenemos a la comparación contra los que se pueden hacer con ayuda de las computadoras y sus CGI. Pero seamos realistas, aún en aquella época los FX de la cinta estaban un pasito atrás de los que vimos en digamos, 2001: A Space Odyssey (Stanley Kubrick-1968); Star Wars (George Lucas-1977); o, Close Encounters of the Third Kind (Steven Spielberg-1977). Pero te hacías de la vista gorda con tal de disfrutar la deslumbrante puesta en escena del comic por excelencia…hasta el arribo de los Hombres Araña y Bátmanes que los acompañan.
Ese juego entre productores y público. Esos valores entendidos que cada parte asumió con cierto grado de autoengaño. Esa manera de tratar el tema con respetuosa irreverencia (no tengo idea de lo que quise decir) para que mordiéramos el anzuelo, la convirtió finalmente en una comedia de aventuras refrescante y poco convencional, que llegó para formar parte de la nostálgica manera con que recordamos nuestra juventud.
Christopher Reeve es, por siempre y para siempre, Superman. Su galanura, que rivalizaba con la de Newman y similares, quedaba suavizada por la pacífica apariencia y mesurados movimientos cuando lo veíamos como Clark Kent. Y su comportamiento tan natural cuando realizaba heroicos actos de protector del bien ya en su personalidad de Superman, jamás ha logrado ser igualado. Probablemente su trágico accidente en 1995, donde quedó cuadripléjico como consecuencia de una caída cuando montaba a caballo, que él asumió con entereza y valentía digna del Hombre de Acero, lo hayan elevado hasta ese nicho de leyenda, pero prefiero creer que la fortuna nada tuvo que ver con que lo escogieran para el papel.
El mejor Lex Luthor de la historia es asumido por Gene Hackman, lo que permite otorgarle legitimidad al malvado personaje, pues la línea entre comedia y pastelazo estaba muy delgada en el caso del villano más conocido de la historieta en que se basa el filme. Aquí lo único que no ha permanecido intacto a las burlas y chistes, es la peluca que exhibe Hackman. Casi tan mala como la de Jeff East cuando personifica al joven Superman en las primeras escenas.
Una secuencia memorable que causaba incluso aplausos entre la audiencia en los cines, es la que se desarrolla cuando Clark Kent intenta asumir el rol de Superman, cambiando sus ropas en una caseta telefónica, simplemente genial. Esa y otras similares reflejan el espíritu de diversión con que se asumió la película, como aquella con ciertos toques de picardía, cuando Superman utiliza su vista de rayos X para determinar el color de los chones de Margot Kidder/Luisa Lane. De más está decir que el asombro de quienes la vimos en la sala de cine, al ver ¡volar! realísticamente a Reeve fue mayúsculo. Esos momentos son oro molido en nuestra memoria.
Un pedazo de nostalgia irrepetible. Un hito en la historia de los filmes cuya simiente son los comics. Un triunfo de la imaginación sobre las carencias y límites de la tecnología en épocas precomputadora. Y una excelente oportunidad de disfrutar en familia de una entretenida cinta de aventuras….de “las de antes”.
Un abrazo.
Quiza no fue el superman mas vistoso, pero si era el que encarnaba la nobleza y valores de este superheroe